Es un tipo de titulación cuyo objetivo es ampliar los conocimientos de la formación inicial para mejorar la inserción laboral y aplicarlos a determinadas actividades profesionales.
Cuenta con una duración de 150 y 400 horas lectivas y tiene entre 15 y 29 créditos ECTS.
Es similar al título de experto, pero se diferencia en la carga lectiva. En este caso se compone de un mínimo de 25 créditos ECTS y de un máximo de 60, con un mínimo de dedicación de 200 horas y un máximo de 400. También se destina a lograr una mayor formación académica profundizando de manera teórica y práctica en áreas concretas para poder aplicarlo de manera profesional.
Existe además la posibilidad de realizar un trabajo final y el título que se obtiene es un Diploma de Especialización.
No se requiere un reconocimiento o acreditación específica, ya que las Universidades tienen la capacidad de expedir títulos propios por la Ley Orgánica de Universidades 6/2001.
En nuestro caso, la Universidad que acredita toda nuestra oferta formativa es la UDIMA (Universidad a Distancia de Madrid)
Los Títulos de Experto/Especialista puntúan como Formación Continua, aunque esto puede variar según la baremación de cada concurso u oposición y se deberán consultar las bases concretas de cada convocatoria.
Sí. Todos nuestros cursos tienen una base teórica sólida, científica y actualizada y está orientado eminentemente a la práctica, para garantizar que los alumnos egresados puedan ejercer con competencia los tratamientos y procedimientos abordados en la formación una vez finalizada la misma.
Es una realidad creciente. Cuando sales de la facultad y te metes en la vida laboral de hospitales, ya sea público o privado, luego te encuentras que llevas 15 o 20 años trabajando y que ya no sales de ahí. Después hay otro terreno laboral como la estética que está creciendo a un ritmo de un 30% -40% al año, ahí es donde está en auge la figura del enfermero.
Los médicos se formaron en su día y tienen un máster en medicina estética y se intenta que el enfermero tenga conocimientos para tener una información más amplia de todas las técnicas que se realizan en la estética.
El enfermero es una figura que ha estado al lado del médico desde que existe la palabra medicina. Actualmente, hay muchos médicos estéticos que están saturados de trabajo y a veces requieren de un profesional como un enfermero o una enfermera que esté a su lado. Si está formado técnicamente está capacitado para poner cualquier inyección siempre y cuando el médico se lo prescriba.
Al igual que hacemos en el hospital, lo mismo en estética. Nuestra formación académica nos autoriza a saber pinchar el tejido subcutáneo, el intramuscular, intravenoso. Debemos hacerlo siempre con la prescripción de ese médico por los posibles problemas que pudieran ocurrir.
La labor del enfermer@ en el ámbito de Tricología es la instrumentación y colaboración con el cirujano en la intervención sacando el folículo y después introduciéndolo como «ayudantes», puesto que ayudáis al cirujano y junto con él. Trabajáis mano a mano con el cirujano formando así un equipo multidiciplinar en donde ellos necesitan de enfermer@s como tú y tú de ellos para lograr en equipo el éxito de la cirugía
Con respecto al ácido hialurónico hablamos de un PRODUCTO SANITARIO, el cual no requiere prescripción médica.
Actualmente la ley hace una distinción entre medicamento y producto sanitario a la hora de establecer la posibilidad del enfermero de trabajar de forma autónoma y sin prescripción médica. El ácido hialurónico es un producto sanitario, no un medicamento, por lo tanto y según el artículo 79 de la Ley del Medicamento, están facultados para dispensarlo de manera autónoma.
Esta regulación lleva vigente desde la aprobación del Real Decreto 954/2015 de 23 de octubre. Además, esta regulación ha sido confirmada a nivel europeo a través del Reglamento Europeo de 5 de abril sobre los productos sanitarios, aprobado en el año 2017